martes, 25 de octubre de 2011

XVIII

Perdido en la sangre,
El aloe derramado,
El pequeño cachorro aúlla.

Gran circo de la luna,
Estrellas fulgurantes sobre nuestras velas.

Indomable corcel, bergantín brioso,
A capa y espada, desenfrenado,
Torturado por la Inquisición.

Un caballo, con una lanza clavada en el pecho,
Agoniza en el tapiz de coral.

-Oh, tú no eres más que un niño...
Déjate de tonterías, vuelve a casa y duerme...

Un avión alemán vuela sobre Londres,
Deja caer ataúdes silbantes sobre mi nuca.

-No eres más que un niño...

No hay comentarios:

Publicar un comentario